lunes, 10 de enero de 2011

Formatos, tamaños, calidades… ¿Qué calidad utilizo para el vídeo corporativo de mi empresa?

Formatos, tamaños, calidades… HD, SD, HDMI, H, I J, K…
¿Qué calidad utilizo para el vídeo corporativo de mi empresa?



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Los que hemos vivido la transición de los formatos analógicos a los digitales en el sector audiovisual, podríamos citar varias decenas de formatos presentados en los últimos 20 años.

Nombres tan curiosos y que les sonarán a chino a las nuevas generaciones de licenciados, como el: Pulgada B y C, Betacam (sin SP y SP), U-matic baja y alta banda, diversos inventos digitales que nunca cuajaron hasta la llegada del Betacam digital, los domésticos Super VHS, Vídeo 8 y Hi 8, y el revolucionario DV.
A estos formatos siguieron los DVC, su descendencia y algún escapado digital más, incluido el Betacam SX.
Hasta aquí las cintas, pero ahora resulta que desaparecen las cintas y llegan los formatos sobre soporte sólido, la alta definición, el 2k – 4k y 3D.

Si eres responsable de una empresa, negocio o institución, estás planteándote realizar un vídeo, posiblemente las productores te abrumen vendiéndote formatos y calidades.

Vamos a analizar varios factores determinantes a la hora de elegir un formato de vídeo y una calidad, sin pretender matar moscas a cañonazos, y sugerir la utilización de equipos de alta gama, más propios del cine o la publicidad, que de un buen vídeo corporativo de empresa.

Punto uno, resolución. Al igual que las cámaras fotográficas captan fotografías de un número concreto de píxeles horizontales y verticales (por ejemplo 4.000 horizontales por 3.000 verticales), los formatos de vídeo digital también tienen dimensiones medidas en píxeles.

La definición estándar o SD (que ha sido la habitualmente utilizada en televisión hasta hace un año) tiene unas dimensiones de 720 píxeles horizontales por 576 píxeles verticales, aproximadamente.
La alta definición o HD puede presentarse en 3 tamaños. 1.280 x 720 píxeles, 1.440 x 1080 píxeles y el Full HD que son 1920 x 1080 píxeles. Yo prescindiría del tamaño menor (1.280 x 720), ya se queda demasiado corto en calidad para competir con sus dos hermanos mayores.
Claramente se ve que entre la SD y la HD hay una diferencia de calidad, en lo referente a la definición y la cantidad de píxeles, de casi tres a uno.

Por otra parte, las pantallas que se venden actualmente (LCD, PLASMA o LED) ya no se fabrican en SD. Todas son HD (1.920 x 1.080 píxeles) y los reproductores de discos de alta definición (bluray) se pueden comprar desde 150€.

Conclusión: Para que te vas a gastar dinero en un vídeo que no esté en HD, si ya no hay pantallas de tan poca calidad. Busca siempre la mayor resolución posible. Tener más definición os aportará mejor imagen a vuestra producción y estar abierto a aplicaciones futuras.

Punto dos, costes. Para empezar, te comentaré que por suerte para ti y desgracia de los productores, como la electrónica avanza a pasos agigantados y los precios bajan, al igual que baja el precio de un ordenador de un año para otro, las cámaras y ediciones para trabajar en alta definición (HD prosumer o de consumo) están al mismo precio que las de calidad estándar hace unos 3 -5 años.

Cuando las empresas te presenten varios presupuestos para un audiovisual, no has de pagar precios desorbitados por una jornada de cámara HD o de edición HD. Piensa que el resto de equipos y profesionales que configuran las producción son los mismos trabajen en alta definición HD o definición estándar SD.

En conclusión: Por un precio ligeramente superior (+10 o 15%), tienen que poder ofrecerte HD. Desestima las grabaciones y ediciones en definición estándar, están desapareciendo y su resultado en pantalla no puede competir con el HD.

Punto tres, Internet.
Si tenemos en cuenta Internet, que deberíamos, como otro de los grandes medios para la difusión de vuestros vídeos corporativos, podréis comprobar cómo en la actualidad ya podéis mostrar vuestros vídeos en HD por medio de portales gratuitos como Youtube y Vimeo, entre otros muchos.

Conclusión: Pudiendo tener más calidad, porque renunciar a esta, si apenas nos va a costar más dinero (+10% o 15%).


Para terminar, unos consejos:
-       Pedid el producto acabado en bluray (para la versión HD) y en DVD panorámico (para la versión SD). Antes de empezar, que os muestren ejemplos reales de sus trabajos en alta definición para observar la calidad.
-       Que la grabación y la edición se realice en HD como mínimo a 1.440 x 1.080 píxeles, y lo ideal es en full HD (1.920 x 1080px).
-       Conservad un master de la producción en disco de datos (disco duro externo, bluray de datos u otros) en un formato con poca compresión para futuras conversiones. La productora debería guardar otra copia.
-       Prescindid de los formatos de HD grabados en cinta con el HDV. Buscar cámaras que graben en tarjetas de memoria en formatos HD de Panasonic o la que utilizamos nosotros, el formato XDCAM de Sony. Ambos son buenos y de calidad. Podéis optar a otros superiores, pero lo vais a pagar caro (económicamente hablando) y no vais a percibir la diferencia.

Ya no hay escusa. Exigid vuestros trabajos en alta definición a un precio razonable.

Seguiremos informado.
Juan Ángel

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